ARGENTINA PROVINCIA DE SANTA FE

PROVINCIA DE SANTA FE Santa Fe Pensaba crucer el rió por la balsa, para evitar la mala experiencia de Rosario, pero la balsa sale solo cuando hay un camión demasiado alto, ancho, o peligroso para seguir por el túnel, es decir que sea muy escaso. Entonces me fui a la terminal de colectivos, y todo se paso muy bien. El billete cuesta 3 pesos, nada por la bici, hay colectivo cada hora, y el chofer rechazo la propina que le propuse. Una hora después llegue a Santa Fe, en la casa de Martín, otro socio de Hospitality-club. Pues parece que mi pagina web me abre puertas. El me atendió muy bien con sus amigos. Me acompañaron para conocer el casco antiguo, me indicaron el taller de bicicletas, comimos asado por cual toque mandolina, tomamos cerveza, compartimos mucho, nunca me quede solo. Mas que salvar plata, eso es lo que espero de las redes de viajeros o ciclistas o otros, escaparme de la soledad o de los encuentros desagradables de los hoteles y hostales y camping. Todos que encontré antes me dijeron Sante Fe puedes evitarla, es feo, peligroso, sin nada. Yo no soy nada de acuerdo. Santa fe tiene mucho para conocer y pasar un rato agradable. Ya la costanera empieza al puente Eiffel, sostenido por cables. De allí sale una vereda que rodea el rió, que no es el Paraná, cubierta de cerámica, a lo largo de la avenida. Esta tiene poco trafico, y por la otra vereda solo hay casas y manzanas bajas, con jardines, lo que es muy agradable, verde, abierto y tranquilo. Además para escarparse totalmente de los coches, hay una segunda vereda a lo largo del rió, sobre la ribera misma, como 2 metros mas a bajo. El paseo tarda 9 Km, con aire fresco del rió, sombra de árboles, cielo y agua azules, vista al rió y a las playas. Por la otra ribera son parques de recreación y campo, verde. Esta caminata se acaba por la basílica Guadalupe, blanca, de estilo gótico, con dos torres. El regreso lo hice por colectivo. Fuimos a conocer el centro con Pipi, un amigo de Martín, que paso unos años a viajar y vivir en Europa y México, bastante interesante para compartir experiencias y aventuras de rumbo. Se entra en el centro por la calle peatonal San Martín. Tiene bastante edificios de estilo andaluz o clásico francés, con esculturas, balcones, y decoraciones. Por una placita hay una iglesia clásica con 2 torres. Al final llegamos a la plaza mayor, con un parque arboreto, y dos palacios oficiales, el museo de arte, amarillo y tipo español, y la municipalidad, blanca y tipo francés. Parecen de piedra pero son de adobe con cimentó. Tienen fachadas regulares con grandes ventanas, columnas, y torres cuadradas bajas, y techo redondo. A la opuesta esta la catedral, muy antigua, de estilo clásico, con la nave de estilo templo griego, y dos torres con techo en copula azul. De allá pasamos a otra plaza con árboles y con casas bajas antiguas, edificadas por los primeros dueños y jefes de la ciudad. Son de madera y adobe, de un piso solo, con el techo que se adelante soportado por palos de madera dando una terraza protegida del sol y de la lluvia. Sirven de museos, y a dentro son aulas con techo de madera y adobe, suelo de cerámica, la escultura de Arsene Lupin, una leyenda de ladrón famoso en Francia del principio del siglo 20, tenia mucha nobleza francesa y era muy inteligente, pues en realidad no es, un ambiente muy sencillo. También hay una iglesia sencilla, antigua, con una torre. Pues es la primera vez que encuentro esos edificios antiguos en perfecto estado, en todo mi rumbo en Argentina, es fenómeno. Seguimos un poco hasta otra plaza arboleda, y llegamos al monasterio San Francisco, otro edificio antiguo de mismo tipo, con un patio planteado a dentro, y la iglesia sencilla. A dentro enseñan una mesa de laminas de madera gruesa, con la huella de la garra de un jaguar, 2 cm de hondo y 30 cm de largo, que vino llevado por él rió, sobre una aísla flotante. Al final llegamos a la laguna sur, ancha, rodeada por un paseo y árboles, y con terreno de deporte. Es el lugar de entrenamiento de los sportitas y de las chicas lindas. Aparte del centro puro, son casas bajas, calles anchas rodeadas de árboles, todo tranquilo y agradable. Ruta 1 Salí temprano de Santa Fe, por el puente Eiffel, y junte la ruta 1, que es la ruta antigua para ir a Reconquista. Tiene poco trafico, y poca población. Entro ahora en el Chaco, la planicie pura, que voy a seguir hasta Paraguay, por las provincias de Santa Fe, Corrientes, Chaco, y Formosa. Son 340 Km y cuatro días largos para llegar a Reconquista. Acampe en los balnearios. El de Cayasta es cómodo, pequeño, con comedor barato, ducha, baños, césped, sombra, y playita, y es escondido atrás de la capilla. En San Javier ya las duchas son rotas, y sirve de terreno de deporte y de parque de encuentro por las familias y amigos por el anochecer, y entonces es muy ruidoso. En Alejandra es todo roto, sin agua, sin baños, sin mesas, con solo niños pobres, temía un poco entonces pedí agua a un vecino y me quede siempre cerca de la carpa y de la bici, comiendo la comida que llevo, atún, sopa, polenta por la cena, budín, queso y pan por el desayuno, mate cocido para tomar. Después de la siesta, cada tarde toque mandolina para descansar, pero nadie venia escucharme, aparte de unos niños. El paisaje es bastante monótono. Son pastos grandes con cereales, choclo, arroz, trigo y papas, o con vacas y caballos. Son rodeados por árboles importados, eucaliptos, pinos, tela, robles, alerces y sauces sobretodo. Por toda la ruta hay casas y fincas desparramadas, escondidas a dentro de un grupo de árboles, con unos nativos, palo borracho con su tronco en forma de panza gorda, laurel, ceibo con flores rojas, lapachos con flores rosas, sauces grises, y ombus con las ramas dobladas como raíces. Hay que decir que no se queda nada de la naturaleza virgen, todo esta cambiado por el ser humano, como en Europa. Los bosquetes y clausuras son de eucaliptos o a veces pinos, y los árboles nativos sirven únicamente de decoración, en los jardines y parques. Solo un poco antes de Cayasta, se quedan pentanos por el lado del rió, con riñes, árboles pequeños con tronco negro, y juncos amarillos. A veces también hay lugares abandonados, con algarrobos y espinosos desparramados. Por la fauna, vi ratones, nutrias chiquitas, serpientes chiquitas, y muchos gorriones negros o de color, amarillo o rojo, y el cardenal, cuerpo gris y cabeza roja, cernícalos bailando en el cielo, de todos tamaños, y unas cigüeñas pasando en el cielo, y mosquitos. Cada pueblo tiene una capilla bonita, y calles arboledas. Por el campo, son tres tipos de casa, la típica de Argentina, con grande fachada y atrás un techo solo, otra esta hecha de tierra, con techo doble de junco, o ahora en lamina de metal, y la ultima moderna, como cual quería en lotes. Hay muchos molinos también, tanques de acero para las cereales. Por la ruta todos me saludaron y luego en los balnearios no me hablaron, gente del campo. Tenia el primer día apenas de viento, el segundo y la mañana del tercero viento en contra. Por suerte en un rato por la tarde del tercero día cambio de 180º el viento y vino del interior, medio a favor y medio por el costado izquierdo, sino no cierto que llegue a Alejandra. De nuevo en un rato cambio el viento de 90º y vino de Buenos Aires, medio por el costado derecho y medio a favor. Como carezco de entrenamiento este año, llegue a Reconquista agotado. Reconquista Pues es otra ciudad moderna, con calles anchas arboladas. En la plaza mayor por el atardecer se juntan todos para tomar mate y charlar en la sombra. Infelizmente también pasean en coches, lo que es muy ruidoso. Al alrededor de la plaza están todos los negocios y los escasos edificios interesantes. El teatro español es de estilo arte nuevo, con un portón y dos torres cuadradas, amarillas. También dos casas de estilo argentino tienen la fachada muy decorativa con la puerta y las ventanas de estilo arte nuevo, todo de cuervas, y con cabezas esculturas encima. En la plaza esta la catedral, en adobe rosa, con dos torres altas y una copula en el centro, impresionante. La nave a dentro es de estilo clásico, blanco, con techo redondo y columnas. Al otro lado del arroyo por la ruta 11, esta Avellanada, un pueblo que tiene la ventaja que los camiones no pueden circular. Por una plaza esta una escultura de una familia de colonios con el buey trayendo un caro. Por la plaza mayor esta la iglesia, bonita. Me quede la mañana allá escribiendo mi diario en la sombra. En Reconquista fui alojado por Gloria, hospitality-club, no charlamos mucho, ella seguía su vida. Pero por sus amigos fui a escuchar un ensayo de coro en la catedral, y después toque mandolina por ellos. El día siguiente fui al puerto, que esta a 15km de la ciudad, con la idea de dormir allá para tomar la balsa a las 6 de la mañana. Saliendo de Reconquista, un ciclista, Juan, empezó a charlar conmigo. Después de un rato, el me convido a dormir en la casita que tenia allá, en un terreno cerca del rió, un lugar muy lindo para estar. Me acompaño, y luego charlamos mucho. Pues fui a las seis al puerto, y esperamos hasta las diez la balsa. Pero no salio, porque de repente la Prefectura pretendió que el capitán no tenía papeles o experiencia suficiente para manejar tal barco grande. Me fui al boliche desayunar, y meditar lo siguiente de mi viaje, y decidí ir al Oeste, y regresar mas tarde a Corrientes. Hasta Tostado Como tenia viento a favor, llegue a las 3h30 en Vera, a pesar que salio a mediodía de Reconquista. Por la ruta, un ciclista, Cesar, me junto y me acompaño para charlar. El paisaje es muy distinto de lo de la ruta1. Son muchos montes nativos, caldenes frenos algarrobos mimosas, espinosos, con a veces campos de cereales, o con vacas o caballos. Y por el lugar del arroyo…… crecen palmares, al principio desparramados, y luego un bosquete denso. En Vera, la policía me mando para acampar al acampamiento de los Gitanos: Por suerte, regresando al pueblo por la ruta de tierra paralela a la 11, vi un lugar parecido a un camping, en realidad la cooperativa agrícola, y el jefe me permitió de acampar. Para escaparme del calor de la tarde, Salí a las siete de la mañana hacia Tostado. Al principio alternan los montes de algarrobos y mimosas con campos de cereales o vacas con árboles desparramados. Luego hay u lugar con todos los árboles hachados, y después se queda solo campo limpio con paja verde gruesa, tipo patagonia, y viento fuerte por el costado norte. La ruta cruce un arroyo serpenteando, azul, con a la izquierda una aldea y al fondo una laguna plata. Luego fueron 40km más y más bravo, viento y calor ampliándose, y me pare en una finca, agotado. Familia, ovejas, vacas, caballos, gallinera, y tractores modernos, pero de otro dueño. 50km despues de Vera, estan los nidos de termitas. son miles y miles por el campo, tapas de tierra de 50 a 80 cm de altura, juntas en lugar como una ciudad, despues se acaba un kilometro, y otra ciudad aparece. Hay que decir que es el unico relieve en el planicie. Después por 30 Km. sigue la misma pampa, y luego hasta Tostado poco a poco regresa el paisaje de montes y campo. En Tostado me fui al camping, todo destruido, pero por suerte el cuidador tiene un kiosco y vende agua. Hace tanto calor que no se puede andar después de las dos de la tarde. El cuerpo cambia todo caliente, como un pollo en un horno, en unos minutos, y hay que pararse o morir.